Descripción:
Los primeros restos de Aragosaurus fueron encontrados en 1958 en el yacimiento de Las Zabacheras, Galve por José María Herrero Marzo, vecino de Galve y aficionado a la paleontología. Según nos ha comentado José María, al realizar la carretera de entrada a la localidad empezaron a salir números restos de huesos. Los trabajadores utilizaban estos fragmentos en el firme de la carretera. Cuando se dio cuenta de la importancia, recupero varios fragmentos, aunque posiblemente una parte de este saurópodo quedó sepultado para siempre debajo de la carretera. Durante varios años, con ayuda de sus hijos excavó la parte del yacimiento que no ha sido afectada por la carretera, recuperando la mayor parte del material de este saurópodo.
Estos restos fósiles se depositaron en el Museo de Teruel y fueron estudiados por el paleontólogo francés Albert Félix de Lapparent en 1960, quién los clasificó como pertenecientes a un nuevo camarasáurido nuevo al que no dio nombre. En 1982 se estudió un diente aislado procedente de un afloramiento cercano a Las Zabacheras que se determinó como un braquiosáurido, por lo que se pensó que los restos de Las Zabacheras también pertenecerían al mismo braquiosáurido (Sanz, 1982). Un equipo de paleontólogos de la Universidad Autónoma de Madrid (José Luís Sanz y Ángela Buscalioni) y el Institut de Paleontologia Miquel Crusafont de Sabadell (Mª Lourdes Casanovas y José Vicente Santafé), definieron el género y especie Aragosaurus ischiaticus en 1987. Usaron para la descripción el material depositado en el Museo de Teruel, colección particular de José María Herrero y colección de la Universidad Autónoma de Madrid. Lo incluyeron inicialmente en los camarasáuridos. Posteriormente se ha propuesto que la forma del fémur y su tamaño relativo respecto al húmero Canudo y colaboradores en 2001 proponen que no es un camarasáurido sino un titanosauriforme. Del holotipo de Aragosaurus se conocían en esos momentos una costilla cervical, 9 costillas dorsales, 13 vértebras caudales y 8 arcos hemales, dos escápulas, coracoides, dos isquiones, pubis, un húmero, un radio, una ulna, un fémur, 2 huesos del carpo, 8 metápodos y 4 falanges. Todos los restos parecen corresponder a un único ejemplar ya que no hay elementos repetidos.Desde finales de los 80 y parte de los 90, las Zabacheras fue utilizado como vertedero, por lo que parecía irremediablemente perdido el yacimiento. Al comienzo de los 2000, los miembros del grupo Aragosaurus limpiaron los escombros, pudiendo verse el nivel fosilífero, pero no encontraron nuevos restos de saurópodos en las Zabacheras.
Aragosaurus ha sido uno de esos dinosaurios en los que ha habido polémica respecto a la edad que tenía, variando desde niveles del tránsito Jurásico-Cretácico hasta el Hauteriviense. Para solucionar la cuestión, nuestro grupo realizo un amplio estudio en el 2011 donde se integradó los datos de carofitas y polen conocidos de los niveles con los huesos de Aragosaurus. La problemática surge si este dinosaurio se encontró en la Formación Villar del Arzobispo o en la Formación Castellar. El estudio geológico detallado demostró que Aragosaurus se encontró en la parte inferior de la Formación Castellar, que en Galve tendría una edad de Valanginiense? – Hauteriviense sin poder precisar más. Sin embargo no había estudios que permitiera precisar la edad de esta parte de la Formación Castellar. Estudios precisos liderados por Marcos Aurell permitió demostrar que el yacimiento de la Zabachera se encontraba en una nueva formación que se definió como Formación Galve. Además estudios precisos permitió situarla en el Berriasianse superior, es decir mucho más antiguo que tradicionalmente consideraron los autores que describieron esta especie
En el año 2013 un equipo de investigación liderado por Rafael Royo describió en profundidad todos los restos conocidos de Aragosaurus, incluyendo algunos nuevos elementos anatómicos de huesos largos. Aplicando las modernas técnicas de análisis filogenético obtuvo que Aragosaurus sería un Camarasauromorpha, grupo hermano de Titanosauriformes, es decir sería más primitivo que se había considerado hasta ese momento. Uniendo esta posición filogenética con la edad del holotipo hace que Aragosaurus tenga una gran importancia en la evolución de los saurópodos, al rellenar un hueco poco conocido y con pocos representantes a nivel mundial como son los macronarios basales.
Como curiosidad, apuntar que la reconstrucción de Aragosaurus que puede verse en la chopera de Galve fue la primera que se hizo en España con un dinosaurio tan grande. Era la década de los 1990 y aún se desconocía aspectos que hoy en día conocemos, como la posición de la cola. Independientemente el aragosaurio como se le conoce es una visita obligada a los que se acercan a Galve a ver su museo