La causa de la retirada del estudio es una carta enviada por el geólogo Luis Gibert al editor de la revista especializada en evolución, según explica él mismo a Materia. Luis es hijo de Josep Gibert, el investigador que en 1982 creyó encontrar en Orce un fragmento de cráneo de un humano que habría vivido hace 1,5 millones de años. Posteriormente, casi con cuentagotas, todos los científicos que defendían la humanidad de aquel cráneo se fueron bajando del burro, primero atribuyéndolo a un caballo y ahora a una cierva u otra hembra de rumiante. Gibert padre se quedó solo. Muchos de los autores del reciente estudio sobre la muela de Orce han renegado en años pasados de los estudios inconsistentes de Gibert, descubridor de los yacimientos.
El hijo de Gibert, que es geólogo en la Universidad de Barcelona, asegura por teléfono que uno de los mayores expertos mundiales en dientes fósiles, José María Bermúdez de Castro, le confirmó a su padre la humanidad de la muela. Bermúdez de Castro, codirector de los yacimientos de Atapuerca, lo niega rotundamente. “No es humano en absoluto”, manifiesta. A su juicio, la revista Human Evolution era “una revista de sexta fila, una hoja parroquial en la que colaba todo”. Este investigador se muestra “sorprendido” por la retirada temporal del estudio sobre la muela de leche de 1,4 millones de años.
El hijo de Gibert, que es geólogo en la Universidad de Barcelona, asegura por teléfono que uno de los mayores expertos mundiales en dientes fósiles, José María Bermúdez de Castro, le confirmó a su padre la humanidad de la muela. Bermúdez de Castro, codirector de los yacimientos de Atapuerca, lo niega rotundamente. “No es humano en absoluto”, manifiesta. A su juicio, la revista Human Evolution era “una revista de sexta fila, una hoja parroquial en la que colaba todo”. Este investigador se muestra “sorprendido” por la retirada temporal del estudio sobre la muela de leche de 1,4 millones de años.
LUGAR Orce, Granada, España