La propuesta de varias comunidades autónomas, incluyendo la aragonesa de considerar a las icnitas de dinosaurios de la Península Ibérica como Patrimonio de la Humanidad se encuentra en su recta final.

 En las semanas pasadas expertos de la UNESCO han valorado los yacimientos de Asturias, La Rioja, Castilla-León, Aragón, Cataluña y Valencia comprobando "in situ" las singularidades descritas en la propuesta española. Además de los coordinadores del Proyecto Félix Pérez-Lorente (La Rioja) y José Antonio Andrés (Aragón), en estas visitas estuvieron presente algunos de los investigadores que están trabajando en las icnitas.

 El grupo Aragosaurus participo en algunos de los yacimientos de Castilla-León y de Aragón. Así los yacimientos de las Tierras Altas de Soria fueron explicados por José Luis Barco. Los de Aragón por José Ignacio Canudo, excepto los del Castellar (Teruel) que lo hizo Alberto Cobos de la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel.

 Para dar respuestas a las preguntas de los evaluadores se ha formado una comisión de expertos de todas las comunidades que ha trabajado en dar al proyecto las últimas precisiones antes de que sea finalmente analizado por la Comisión ejecutiva de la UNESCO. La línea de trabajo que se ha llevado es resaltar que lo excepcional de los yacimientos ibéricos es que en un espacio geográfico pequeño se encuentra representado una parte significativa de la vida de los dinosaurios deducida a partir de su comportamiento. Es un definitivo un significativo Megalaboratorio de la Evolución. El trabajo está bien hecho, ahora se necesita además un poquito de suerte.

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