La Cueva de los Huesos de Obón se encuentra en el término municipal de Obón, Parque Cultural del Río Martín. Nuestra primera visita a la cueva fue guiada por miembros del Grupo Espeleológico "El Farallón" de Montalbán y del Parque Cultural del Río Martín, durante la primavera de 1997. Esta primera inspección fue determinante para el proyecto de investigación paleontológica que venimos desarrollando desde el año 1998 en la Cueva de los Huesos de Obón, con la ayuda del Parque, la Dirección General de Patrimonio y el IET.
La cueva se ha formado en calizas, concretamente en unos antiguos fondos marinos Jurásicos que a su vez contienen restos de fósiles marinos como los ammonites. La cueva se abrió hace entre 5 y 2 millones de años y posteriormente se rellenó con tierra y restos de animales (entre 400.000 y 120.000 años), y de un medio muy distintos a los de ahora, con más árboles y agua corriente y con unos animales como los rinocerontes, toros y caballos antiguos, ciervos, hienas, lobos, osos, ciervos, bucardos y hámsters, que difícilmente encontraremos hoy en el parque cultural del Río Martín, algunos de ellos en ninguna otra parte del mundo, pues se extinguieron al final del Pleistoceno. La asociación de mamíferos permite asignar a la acumulación una edad Pleistocena, probablemente Pleistoceno medio.
Los restos de animales seguramente fueron introducidos por las hienas, ya que hasta ahora no hemos encontrado ninguna marca de corte que nos indique actividad humana. Además de las hienas otros carnívoros, como los lobos, zorros y comadrejas entrarían esporádicamente en la cueva para consumir los restos de los herbívoros que les "sobraban" a las hienas.
La cueva se ha formado en calizas, concretamente en unos antiguos fondos marinos Jurásicos que a su vez contienen restos de fósiles marinos como los ammonites. La cueva se abrió hace entre 5 y 2 millones de años y posteriormente se rellenó con tierra y restos de animales (entre 400.000 y 120.000 años), y de un medio muy distintos a los de ahora, con más árboles y agua corriente y con unos animales como los rinocerontes, toros y caballos antiguos, ciervos, hienas, lobos, osos, ciervos, bucardos y hámsters, que difícilmente encontraremos hoy en el parque cultural del Río Martín, algunos de ellos en ninguna otra parte del mundo, pues se extinguieron al final del Pleistoceno. La asociación de mamíferos permite asignar a la acumulación una edad Pleistocena, probablemente Pleistoceno medio.
Los restos de animales seguramente fueron introducidos por las hienas, ya que hasta ahora no hemos encontrado ninguna marca de corte que nos indique actividad humana. Además de las hienas otros carnívoros, como los lobos, zorros y comadrejas entrarían esporádicamente en la cueva para consumir los restos de los herbívoros que les "sobraban" a las hienas.
LUGAR Parque Cultural Río Martín,Teruel