Cuando descubrimos un ejemplar bastante completo de un vertebrado mesozoico, ya sea un dinosaurio o un cocodrilo nos ponemos muy contentos ya que se puede encontrar un montón de información, pero no es lo habitual. Al menos en el Cretácico Inferior de Teruel, donde el material fragmentario es lo normal en encontrar. Por ejemplo, un diente aislado de cocodrilo da poca información, pero si en vez de uno, tenemos cientos del mismo yacimiento podemos tener datos de interés.

El yacimiento de la Cantalera es excepcionalmente rico en dientes de cocodrilos de pequeño tamaño recuperados por medio del tamizado. Muchos de ellos son tan diminutos que solo se pueden ver en el microscopio. Un trabajo que acabamos de publicar en la revista palaeo electrónica liderado por Eduardo Puértolas demuestra que están representados diferentes tipos de cocodrilos en este yacimiento. Lo más significativo es que faltan ejemplares grandes, siendo en su mayoría cocodrilo de pequeño tamaño.

Hay representados cuatro taxones de cocodrilos al menos. Sus dientes demuestran la gran variedad de dietas que tenían en el Cretácico Inferior. Los hay en forma de hoja, con bordes afilados, especializados en insectos. Otros tienen una forma globosa y más adaptados en alimentarse con conchas duras como podrían ser invertebrados y también los que tienen la forma típica cónica de los cocodrilos actuales.

Una de los aspectos que se abordan en el trabajo es explicar la enorme abundancia de individuos pequeños. Una de las propuestas es que el entorno de la Cantalera fuera un lugar de nidificación de cocodrilos. A este respecto las cáscaras de huevo son abundantes en el yacimiento. El tiempo nos confirmará la hipótesis. El trabajo se puede descargar gratis.


La referencia completa es: Puértolas-Pascual, E., Rabal-Garcés, R., Canudo, J.I. 2015. Exceptional crocodylomorph biodiversity of “La Cantalera” site (lower Barremian; Lower Cretaceous) in Teruel, Spain. Paleontologica Electronica 18.2.28a, 1-16

LUGAR Josa, Teruel, España