Las icnitas de dinosaurios representan una parte muy pequeña de la morfología de un dinosaurio, además procesos relacionados con el comportamiento del substrato pueden alterar significativamente la morfología, llegando a ser imposible reconocer la morfología de la planta del pie que la formó. Sin embargo, esto no la descalifica en su importancia para reconocer la paleobiodiversidad de un ecosistema del Mesozoico. En primer lugar son muy abundantes y diversas como sucede en el Cretácico inferior de la Rioja, y sin embargo los restos óseos son por el momento muy escasos. Por tanto reconociendo diferentes tipos de icnitas a partir de ejemplares adecuados, podemos tener una aproximación a un número mínimo de taxones representados.

 Esta es la filosofía desarrollada en este trabajo presentado al “Congreso Tribute to Charles Darwin to Bernissart iguanodons: New perspectives on Vertebrate Evolution and Early Cretaceous Ecosytems” que se está celebrando esta semana en Bruselas (Bélgica). Los investigadores demuestran como en el Cretácico Inferior de la Rioja están representados cuatro morfotipos diferentes de icnitas de ornitópodos. De manera informal utilizan nombres de los icnogéneros Brachyiguanodonipus, Iguanodonipus y Hadrosaurichnoides y un morfotipo sin nombre. Para diferenciarlos utiliza forma y robustez de los dedos, forma general. Si quieres conocer más te puedes descargar el Pdf al final del texto

La referencia completa es:

Díaz-Martínez, I., Pérez-Lorente, F., Pereda-Suberbiola, X. & Canudo, J. I. 2009. Iguanodon-like footprints from the Enciso Group (Aptian, Lower Cretaceous) of La Rioja (Cameros Basin, Spain. Tribute to Charles Darwin to Bernissart iguanodons: New perspectives on Vertebrate Evolution and Early Cretaceous Ecosytems, Programme, Abstracts and Field Trips Guidebook, 9-13 February, Brussels, 2009, 34.

LUGAR La Rioja, España

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